Durante un evento, quiere resaltar su belleza, especialmente el rostro. El cuidado de la piel forma parte de ello. Especialmente la cara en la que casi todo el mundo le mira. Pero, ¿cómo se consigue ese aspecto tan estupendo? Y que todo el mundo pueda admirarle durante una comida. La contaminación, la fatiga y el estrés excesivo son los causantes de esta transformación de la piel. Esto lleva a las mujeres a utilizar todo tipo de productos que pueden no ser eficaces. Pero el consejo que debe seguir es el uso de la mascarilla facial que jugará un papel muy importante.

Preparación de la piel

Para que las mascarillas sean efectivas en el rostro, su piel tendrá que estar limpia primero. El objetivo es que sea capaz de absorber los nutrientes de los productos. Para ello, utilice una leche limpiadora acorde con su tipo de piel. Permite eliminar o quitar las células muertas de la cara que sean pequeñas o grandes. Para que tenga más éxito, utilice también un exfoliante antes de poner la mascarilla. Servirá para eliminar las pieles que están muertas y otras suciedades. Una vez eliminadas todas estas impurezas, la piel podrá recibir los principios activos difundidos. Notará los beneficios de la mascarilla casera después de usarla. Si se excede en los ingredientes activos, la salud de su piel mejorará, así como su apariencia. Existen varios tipos de mascarillas para purificar la piel en función de sus necesidades. Ya sea para calmarla, hidratarla, rejuvenecerla o incluso refrescarla. Se proporcionará una guía para ayudarle a adquirir y utilizar uno.

Pieles secas

Si su rostro está un poco seco o deshidratado, la mascarilla hidratante le ayudará a solucionar el problema. Su composición son los lípidos, y por supuesto los principios activos que ayudan a hidratar. Por ejemplo, ácido hialurónico e ingredientes grasos: aguacate, aceite de argán o manteca de karité. Y a continuación, aclarar con agentes calmantes como el agua termal o el agua floral. Todos estos ingredientes utilizados serán capaces de transformar su cara seca en una textura suave. Cuando lo aplique, masajee su rostro suavemente con un algodón o una toalla húmeda. Se sentirá calmado e hidratado rápidamente. Para un mayor cuidado, utilice mascarillas reservadas para la noche. Este tipo de mascarillas se utilizan sólo una vez a la semana, a no ser que su cara esté muy seca.

Piel grasa o con granos

Otro tipo de piel es el rostro graso en el que tiende a ser brillante como si siempre tuviera grasa. El exceso de sebo provoca este rostro graso. Pero debe utilizar mascarillas equilibrantes que no la resequen. La base que debe utilizar es la arcilla verde que extrae rápidamente este tipo de suciedad. Para evitar que se reseque, utilice también aceite esencial o vegetal o incluso agua floral. Si su piel está cubierta de puntos negros: esto perjudicará su belleza, utilice uno que purifique y desobstruya los poros. Pero la composición aquí será de arcilla blanca. La piel es sensible y puede sufrir erupciones como granos. No existe una cura milagrosa que los elimine de por vida, pero la solución es reducir su aparición. Por ello, se recomienda colocar mascarillas reguladoras en las áreas o zonas afectadas. La base está compuesta por arcilla y activos de tipo astringente. Elija bien y conoce bien su tipo de piel antes de actuar, porque si alguna vez utiliza el producto equivocado, le causará más daños.

Piel apagada y sin brillo

Debería tener uno de estos tipos de cara. Así que, por favor: utilice una mascarilla casera o compre a los expertos. Pero para conocer un rostro que necesita cuidados: verá que está cansado y cambia rápidamente de color como el grisáceo. Especialmente esto se suma al estrés. Para empezar a mejorar la piel del rostro: utilizar mascarillas exfoliantes a base de enzimas de ácidos de frutas o AHA. Su función es comer o eliminar la piel muerta a toda velocidad. Esto hace que la piel se vuelva opaca, pero una vez hecho esto, su luminosidad regresa. Si quiere atacar las imperfecciones de su cutis, como las rojeces o la pigmentación del color de la piel: utilice los blanqueadores. Se utilizan para mejorar el daño solar y las manchas. Para equilibrarlo todo y volver a tener el rostro original: es necesaria una mascarilla paralela. El objetivo es despertar la tez con la ayuda de cócteles mágicos compuestos de vitaminas y oligoelementos. La mascarilla es la compañera perfecta para una piel perfecta.